[PV] Ultima Escena. Octavia y su álbum Superluz

[Teru Mikami]

Your own Personal Jesus... y bueno, es que no resulta casual que la primera emisión del video musical de la canción Última EsCena, promocional del último álbum Super Luz de la banda mas representativa del rock fusión nacional, Octavia, fuera programada para la pasada Semana Santa
 

http://youtu.be/_c1z6ypqazU

Es la historia de nuestra pasión,
y su última escena.
Es el fuego que nos atrapó
Y la forma en la que todo terminó.

Con datos de El Deber y muchas otras fuentes xD

A la vieja usanza, Octavia colgó en Abril 22 pasado su nueva placa en los estantes de una disquería. Superluz ya se encuentra a la venta en todas las agencias de Discolandia del país, además de la tienda virtual iTunes y en la plataforma www.quevivaBolivia.com. 

El disco original contiene una memoria del proceso de grabación, fotografías de la banda, la letra de las 11 canciones, un arte gráfico diseñado por los propios músicos y un empaque que enorgullece a la agrupación abanderada del rock nacional. Los seguidores recibirán un poster de 1x60 m. con la compra. ¡Para coleccionar!

Omar González (voz), Simón Luján (guitarra), Vladimir Pérez (bajo), Gimmer Illanes (instrumentos nativos) y Martín Fox (batería) están más que contentos con el resultado de la composición, producción, grabación y edición del álbum, pues el grupo se encargó de todos los detalles, a excepción de la masterización, que estuvo en las manos de  Mike Couzzi, que hizo su trabajo en Mico Mastering de Miami (EEUU).

El conjunto paceño logró que Superluz tenga su sonido en vivo. Por ejemplo, la batería se escucha más acústica y se evidencia la incorporación de ritmos con los que no había experimentado antes, como el de Última escena, el primer corte promocional, cuyo videoclip fue guionizado por Omar y dirigido por Vladimir.

El siguiente corte de la obra estará entre Superluz, Un día perfecto y Eres tú. Los artistas aún no han decidido el orden de salida.

Y aunque no habrá gira promocional, la banda ya incorporó algunas canciones nuevas a su repertorio. Lo que sí planean realizar son conciertos multitudinarios para el segundo semestre del año, donde esperan reunir a por lo menos 5.000 personas por espectáculo. Esperamos que Bolivia sea iluminada por esta Superluz 

Superluz es el título de la décima producción de la banda, un nombre que alumbra la línea que los autores de Disco Lipstick utilizaron para entrar al estudio de grabación. De aquel proceso en el que se ocuparon íntegramente de la composición, producción, grabación y mezclas salieron temas como Superluz, Un día perfecto, Elíxir y Todo lo que ves. La agrupación dio un ‘refresh’ a su característico sonido e intentó volver a las raíces de su leyenda. “El disco tiene la esencia de los primeros tiempos de Octavia”, explicó el guitarrista Simón Luján. “Tenemos mucho pop, con una batería más acústica, sin tanta máquina como lo veníamos haciendo. Y habrá un cover que dará qué hablar”.

El sucesor de Medular tendrá el difícil reto de superar las producciones que tuvieron las manos de los reconocidos Fabián ‘Tweety’ González y Richard Coleman, pero eso no preocupa a los músicos, que tomaron el control de todo porque se sintieron preparados. Los roqueros se mantienen alejados de los mensajes ideológicos en su música. “No cantamos sobre temas políticos, de la realidad nacional. Quizás hacemos un guiño, pero eso es todo. Nuestra música es para abrir otra dimensión”, dijo Omar. Una máxima roquera

EN DETALLE 

- Ricardo Sasaki, exintegrante de la banda, colaboró en el disco, produciendo una de las canciones en EEUU.

- Última escena se estrenó en la radio paceña Stereo 97 y en simultáneo con las redes sociales.

- La placa fue masterizada por Mike Couzzi en Mico Mastering de Miami (EEUU), el mismo ingeniero que masterizó sus últimos trabajos.

- Los músicos empezaron a componer hace dos años y desde finales del 2013 están trabajando en el disco.

- La agrupación considera que Santa Cruz es una plaza fiel, donde quieren llegar cada año para tocar.

- Los integrantes de Octavia después de 25 años conviven en un ambiente relajado y familiar. Dicen que el tiempo de crisis ya pasó.

OCTAVIA TOMA EL CONTROL DE TODO EL PROCESO

El grupo aún no ha terminado los festejos de sus 25 años. Cuando lancen tres cortes de su nuevo álbum saldrán de gira promocional. En mayo tocarán en Buenos Aires.
 
El lanzamiento de Última escena se hizo a través de las redes sociales, pues el grupo tiene contacto directo con sus seguidores. La canción empezará a escucharse en las radios.

Después de haber trabajado con distintos productores de Chile, Argentina y EEUU, los músicos decidieron que estaban preparados para producir su propia música.

PUNTOS DE VENTA

Para todos aquellos que se preguntan dónde encontrar el  nuevo disco, presumimos que la misma cadena de disqueras que difundió el álbum Medular podrá proporcionar el material en todo el país:

DISCOLANDIA (en toda Bolivia)
CASA ROSVAL (Centro Comercial Cristal, La Paz)
NUEVO MUNDO MUSICAL (Cochabamba)
GALERIA MUSICAL JR. (Plaza 14 de Septiembre, Cochabamba)

ENTREVISTA PARA BOLIVIAN TOWN

DISFRÚTALO EN SOUNDCLOUD

(Se puede descargar xP)

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En justicia, esta canción es elegida como el Video Semanal en Ajayu del 28 de Abril al 4 de Mayo.

 

[Teru Mikami]

Realmente la página en Facebook de El Llokalla me impresionó. No había sentido esa sed de lectura de artículos desde mis tiempos de subir en 27 revisando "El Juguete Rabioso" xD

Les comparto un artículo de reciente publicación. Sólo espero que para cuando me case, pueda contratar aún a la banda que cautiva mi corazón 

OCTAVIA - EL GIGANTE MINIATURA DEL ROCK BOLIVIANO (por M.F)

Durante mucho tiempo fui fan de Octavia. Su album “Aura” salió cuando estaba en colegio (mediados de los 90) y quedé enganchado con la originalidad del sonido y las letras. Me llevé el disco a un viaje de intercambio y la música de Octavia producía potentes ataques de nostalgia. Por esas épocas, Rodrigo Villegas ya había lanzado el Almaqueloide y la movida de tocadas en vivo (sin “tributos” o “especiales”) era intensa. Las bandas en vivo que cobraban las entradas más caras eran las que tocaban sus composiciones propias. Y abundaban los lugares para escucharlas. El Equi de la Belisario Salinas (antes de su desplome), el actual Equi, la Ronería, la discoteca Dragonfly, Cañerías, Rock and Feller’s, Rockhouse.
Por esos años años aprendí también a tocar guitarra, y por supuesto, la canción básica para iniciar el repertorio de canciones nacionales era “Después de ti”. Cuatro acordes simples, pero poderosos que todavía la gente canta a todo pulmón en cualquier guitarreada. Aura es para mí el mejor disco de Octavia, y así lo confirman canciones como Cuecaína, Si mañana, Tendida como un Arco y RHO+. Durante mis primeros años de Universidad, acompañado de amigos fans del rock nacional, recorríamos los boliches de Sopocachi, y los festivales de música para cantar junto a Omar Gonzales este rock amalgamado con loops y secuencias electrónicas, sazonadas con sonidos de instrumentos nativos, especialmente la quena y la zampoña.
Después del Aura vino el Ciclos (cómo olvidar los overolcitos naranjas y la cabeza rapada del Omar), después el 4 y después….un montón de discos de una banda que había dejado de palpitar para producir un rock monótono y autoimitativo. La mística de la banda se rompió cuando Octavia empezó a tocar bajo contrato en eventos privados o poner su música como “bonus” comercial de sus patrocinadores. La distancia romántica entre el artista y el público se rompió. Desde entonces, Octavia ha estado aceptando un modelo de negocios excesivamente amplio. Uno puede contratar a Octavia para una boda y el siguiente fin de semana, tocan en el Teatro al Aire Libre, de teloneros de Café Tacuba. Un supermercado puede contratarlos para tocar en la inauguración de una sucursal, y más tarde se van al Equi para tocar para los nostálgicos. Después, se van a Argentina a tocar para los residentes bolivianos allá y dar cierta apariencia de “internacionalidad”, y a la semana siguiente tocan en alguna kermesse de un colegio, o en una feria o graban una canción publicitaria para la Cervecería Boliviana Nacional. Octavia se ha convertido en la banda icónica que no dice no a ningún lugar, a ningún contrato, a ningún contratante.
Al final de cuentas es su arte y los músicos de Octavia son libres de hacer con él lo que les plazca. El lector podrá decir que el modelo de negocios de Octavia hace que sea una banda “humilde”, nivelada con su público. Yo replicaría que la humildad en este caso huele más a conformismo. En verdad, si uno vive en Bolivia y concretamente en La Paz no faltan oportunidades para ir a escuchar a esta otrora maravillosa banda. La diferencia es que ahora, al ir a ver a Octavia ha dejado de ser una experiencia artística, y más parece ser un show montado para simular una banda extinta de los años 90. Ahora Octavia provee servicios de música de fondo para borrachos o para nostálgicos que aún recuerdan alguna parte de las letras de las canciones del Aura o del Ciclos.
Este modelo de negocios conlleva dos costos. El primero es que el costo que paga por Octavia por ser excesivamente complaciente con sus financiadores. Si el cliente espera recibir su enlatado de canciones icónicas, eso reduce el espacio a crear o promover nuevas canciones y producir interés en nuevos sonidos o estilos. El sonido de Octavia no evoluciona desde el disco “4”. La salida de Ricardo Sasaki es notoria en la simplicidad de los arreglos musicales que, por lo general, repiten o emulan algun hit anterior. No es de extrañar. La composición ha empezado a satisfacer el modelo de negocios: si pago por 45 minutos de Octavia quiero mis hits, quiero el formato, quiero aquello por lo que he pagado.
El segundo y más triste costo, es el que esta forma de trabajar tiene en el resto de las bandas nacionales. Si la mejor banda de Bolivia necesita recurrir a esta estrategia de retorno rápido de “microcontratos”, ello no abre mucho espacio para la esperanza o la inspiración de los músicos que admiran o crecieron tocando las canciones de Octavia, y que desean trascender las fronteras para inspirar a un público más amplio que los cuarentones de Sopocachi. Esta forma de microadministrar arte genera la peligrosa ilusión de que el arte boliviano es chico, para publicos chicos, para eventos chicos y para escenarios chicos.
Como fan y músico estoy convencido de que el arte de Octavia está al nivel de Soda Stereo, Café Tacuba, Juanes, Maná, la Ley, Illya Kuriaki y otros grandes del rock latinoamericano. A nivel de composición y estilo Octavia tiene toda la solvencia para salir de las clasificaciones tradicionales y reclamar su sitial de gigante del rock boliviano. El problema, creo yo, es que ellos están jugando a ser gigantes, en una escala miniatura.